En Recetas Nestlé® exploramos algunas preparaciones exquisitas con este alimento
Hay recetas con tomate en las que tenemos que licuarlo, cortarlo de diferentes formas, rallarlo, hornearlo, llevarlo a la airfryer o a la brasa. Hay tantas opciones para sacarle provecho a esta verdura que quisimos recopilar algunas de nuestras preferidas.
Pero antes de entrar al mundo de las recetas, dejamos a continuación algunas de las bondades nutricionales del tomate. Por su contenido de Vitamina C contribuye a la protección de las células frente al estrés oxidativo, también ayuda al funcionamiento normal del sistema inmunitario y aumenta la absorción de hierro. Además, se considera fuente de vitamina A, aportando al metabolismo normal del hierro.
RECETAS CON TOMATE
Se trata de un alimento supremamente versátil, esos ingredientes que amamos para cocinar todo tipo de platos, por eso, vamos a repasar algunas de las recetas con tomate más deliciosas.
CREMA DE TOMATE
Sin duda es una de las preparaciones más conocidas en las que utilizamos esta verdura, por eso tiene que estar en los primeros puestos de la lista. A simple vista es fácil de identificar, pues es de color rojo, aunque sus acompañantes pueden variar muchísimo.
Entre los que no deben faltar, pues siempre aportan a la sazón, están la cebolla, algunas hierbas aromáticas (el perejil y el cilantro son los más usados) y el aceite de oliva. La Crema de Leche NESTLÉ® o el yogurt griego suelen usarse para entregar esa textura ideal.
- Para darle profundidad: uno o dos dientes de ajo, una zanahoria picada o incluso sacarle provecho a un caldo de verduras son opciones estupendas.
- Para crear un contraste de texturas: los crotones y los frutos secos funcionan a la perfección.
Para hacer juegos de sabores: un poco de jugo de limón le da un ligero toque ácido, mientras que una salsa picante le entrega un elemento ardiente.
TOMATES RELLENOS
Un ejemplo perfecto para darle rienda suelta a la imaginación al momento de preparar el relleno de estos tomates. Podemos tener opciones únicamente con verduras, añadir carnes o experimentar con quesos y gratinados.
Cuando vayamos a preparar el relleno es importante tener en cuenta el tamaño del tomate. Si son pequeños o medianos, es mejor usar verduras, maíz y quesos. Los grandes son ideales para guisos con carnes, pues hay más espacio para la proteína.
Podemos cortar el tomate de diferentes formas:
- Por la mitad: de esta forma aprovechamos un solo tomate para probar dos rellenos diferentes. Este tamaño, además, funciona muy bien para ser una guarnición o una merienda gourmet en una reunión.
- Cortando únicamente la parte superior: acá es necesario casi que hacer una tapa o un techo con el mismo tomate. Así podemos usar más relleno en una sola preparación, por lo que puede tener protagonismo en el plato.
SALSA DE TOMATE CASERA
Esta es una guarnición que podemos usar para acompañar una gama muy amplia de preparaciones. Desde pastas hasta carnes, desde pizzas hasta mariscos, la salsa de tomate es fabulosa para darle un sabor espectacular nuestros platos.
Normalmente se cocina, primero, una especie de guiso o sofrito con ajo, pimentones y cebolla. Luego se añade el tomate. Lo mejor es que esté triturado o cortado en trozos muy pequeños, así vamos a ahorrar un buen tiempo. Esta es la base, pero podemos seguir jugando.
- Hierbas aromáticas: un poco de albahaca u orégano funciona de maravilla para tener un sabor más intenso y un aroma cautivante.
- Ligeramente picante: añadir unos chiles picados, pimienta o salsa picante es una idea estupenda para las personas que prefieren las guarniciones más intensas.
Dependiendo de qué tan líquida o espesa queramos nuestra salsa, podemos pasar la mezcla por un colador o triturarla en la licuadora.
Un tip antes de continuar: puede que la salsa lleve un sabor ácido debido a las semillas del tomate. Para reducirlo, simplemente añadimos azúcar. Incluso, si queremos que tenga esa sensación dulzona, agregar miel es buena idea.
BERENJENA Y TOMATES, BUENOS AMIGOS
Hay algunos ingredientes que, simplemente, van de maravilla el uno con el otro. El jamón y el queso son un ejemplo que encontramos con frecuencia, así como la variedad de cereales que muchos comen a diario con leche o yogurt. Entre las verduras, la berenjena y el tomate son muy buenos amigos.
Recetas con tomate
Además, tenemos unas cuantas opciones para fortalecer su amistad.
- Berenjena rellena: como es una verdura más grande podemos aprovecharla para usar más ingredientes o, simplemente, más relleno. Aunque lo mejor es utilizar una buena variedad alimentos y condimentos, darle protagonismo al tomate es una excelente idea.
- Berenjena, tomates y hierbas aromáticas: esta es una de esas combinaciones sencillas, pero fabulosas para nuestro paladar. Simplemente cortamos nuestras verduras en cubos y las cocinamos en una sartén con perejil y/o cilantro.
- Berenjena, tomates y queso: un aperitivo estupendo que no deja de verse fabuloso. Se corta la berenjena en rodajas, se añade salsa u otra rodaja de tomate encima, y finalmente queso parmesano. Al horno por unos minutos y ya, fácil y rápido.
UN SÁNDWICH CLÁSICO
Pan con mantequilla, jamón, queso, lechuga, tal vez una salsa, incluso pimienta y, por supuesto, unas cuantas rodajas de tomate. Se puede comer frío, calentar en el horno o asar en una sartén, dejando el pan crocante y exquisito.
Es muy fácil de hacer, por eso mismo es un snack fabuloso para comer en cualquier momento del día, ya sea a media mañana, al final de la tarde o, incluso, hay quienes en la noche prefieren una cena ligera y un sándwich se convierte en la alternativa perfecta.
CON PASTA
Dijimos que la berenjena y el tomate saben muy bien cuando los usamos juntos en la cocina, pero tal vez la pasta tiene una relación más estrecha con el segundo. Las famosas preparaciones napolitanas tienen a esta verdura como protagonista, así que tenemos una gran variedad de pastas para hacerla.
Por su parte, también podemos añadir algunos trozos entre las capas de una lasaña. En cualquiera de los casos está la posibilidad de usar una salsa o pasta de tomate, o crudo en distintos cortes.
ENSALADAS
Si queremos explorar las recetas con tomate no podemos olvidarnos de su importancia en las ensaladas. A partir de la preparación tradicional, con lechuga y cebolla, podemos añadir muchísimos alimentos entre frutas, verduras, frutos secos, frutas deshidratadas y hasta pollo. Esto sin hablar de las vinagretas.
La remolacha, el pepino, la manzana verde, la mandarina, los pistachos, la zanahoria rallada y el jugo de limón son tan solo unas pocas opciones que tenemos a nuestra disposición para preparar las mejores ensaladas con tomate.
CON GRANOS
Aunque estamos hablando de una verdura que funciona de maravilla sin necesidad de tener muchos compañeros, pues, a fin de cuentas, sabe muy bien por sí sola, también se suele usar con bastante frecuencia para entregarle sabor a otros alimentos. Un muy buen ejemplo son los diferentes granos, como lentejas, fríjoles o garbanzos.
Así los preparemos en una olla común y corriente o en la exprés, lo mejor es que estén acompañados de otros elementos que aporten a la sazón. Usualmente es una mezcla de verduras en la que los tomates siempre están incluidos.
Otra opción es, una vez tenemos listos nuestros granos, simplemente cortamos el tomate en cuadros y mezclamos, pero sin cocinar, usarlo crudo. Esto le da frescura y color al plato.
Te contamos todo sobre la balanza de cocina, el secreto de las recetas perfectas.
EL TOMATE Y LA COCINA MEXICANA
Aunque es un alimento que se usa en platos de todo el mundo, no podemos negar que hay una conexión especial con la gastronomía de México. Su origen es americano y los aztecas le llaman “xïctomatl”, que significa “fruto con ombligo”. Algunas de las preparaciones más emblemáticas llevan tomate. Estos son unos cuántos ejemplos.
- Salsa mexicana: no hablamos de la misma salsa de tomate que mencionamos arriba, pues acá queremos que sea intensa, picante. ¿Cómo lo logramos? Añadiendo algunos chiles. Además, la versión mexicana también tiene más cuerpo y pedacitos no triturados de tomate.
Pico de gallo: una verdadera exquisitez que va de maravilla con nachos, tacos o, incluso, platos que no son típicos de México, como puede ser un pescado o una ensalada. Existen muchas recetas que varían una de la otra, pero el tomate, la cebolla y el chile, con un ligero toque ácido de jugo de limón, son fundamentales.
- Sopa mexicana: a grandes rasgos no es muy diferente a la crema de tomate, el gran cambio es que acá tenemos otros ingredientes adicionales, así que es un plato más pesado. Además del tomate y las verduras, no puede faltar el aguacate, los totopos o nachos, y el pollo.
- Entomatadas: siempre llevan varios ingredientes, pero hay dos que no pueden faltar. En primer lugar, obviamente, el tomate; en segundo, las tortillas. Estas están bañadas en una salsa del primero, que incluye otros elementos (usualmente algún tipo de chile). Se doblan por la mitad y pueden tener rellenos, como pollo, queso, fríjoles o carnes.
¿CÓMO ELEGIR LOS TOMATES?
Buscamos una piel brillante, lisa y sin ningún rastro de manchas o puntos negro, marrones o cafés. En cuanto a la textura, lo mejor es poder apretarlos suavemente. Si se siente muy blando, es que está demasiado maduro; por el contrario, si es muy firme significa que le falta madurar. Queremos un punto medio, que ceda un poco.
Conoce cuáles son los diferentes tipos de sopas.
Fuentes:
https://www.cocinacaserayfacil.net/salsa-tomate-casera-receta/
https://www.muysaludables.com/como-elegir-tomates-consejos-practicos-y-sencillos/