Salsa de soja con palitos chinos

Tips

Aprende a preparar y usar la salsa de soja

Conoce el origen y el modo de preparación de la salsa de soja, uno de los ingredientes principales de la comida asiática. 

Descubre más sobre la salsa oscura que mejor acompaña el sushi, el salmón y el arroz frito

La salsa de soja es uno de los ingredientes infaltables en la cocina asiática y es uno de los responsables de avivar los sabores de muchos platos icónicos, como el arroz frito o el sushi. Lo que muchos no saben es que existen diferentes tipos de salsa de soja y, además, que es un aditivo que puedes preparar desde casa.   

Hoy en día existen miles de productores de salsa de soja y lo puedes encontrar en tu supermercado más cercano, pero en su forma más auténtica está elaborada con la fermentación de cuatro elementos: granos de soja, trigo, agua y sal.   

Para que descubras un poco más acerca de la salsa de soja, vamos a hacer un recorrido completo desde su origen hasta sus recetas más conocidas.   

 

¿CUÁL ES EL ORIGEN DE LA SALSA DE SOJA?   

Aunque es una salsa que ha acogido protagonismo en la cocina japonesa, sus orígenes se remontan en China hace más de dos mil años.   

Cuenta la leyenda que un monje budista chino en uno de sus largos peregrinajes por Asia aprendió a elaborar una especie de miso (un condimento o pasta aromatizante muy conocida en Oriente) para conservar alimentos. Cuando lo empezó a elaborar en Yuasa, una prefectura china en Wakayama, se dio cuenta que en el fondo de los barriles de miso aparecía un líquido oscuro y concentrado. Se le ocurrió que ese líquido podía funcionar para darle sabor a las comidas, y así nació la salsa de soja.   

Como gran parte de los descubrimientos en la cocina, sucedió por accidente y se convirtió en uno de los inventos involuntarios más famosos de la gastronomía asiática.   
 

¿Qué tipos de salsa de soja existen?   

La salsa de soja tiene un sabor característico universal, pero en Japón existen diferentes clasificaciones según el método de elaboración y los ingredientes que utilizaron para lograr el resultado final.   

Estos son los cinco tipos de salsa de soja que existen:   

  • Salsa oscura (Koikuchi soyu): es la más común de las cinco, oscura y con un sabor muy intenso. Es la base de la salsa teriyaki y se puede usar como condimento en múltiples recetas, como el sushi. Esta es la que muy seguramente encontrarás en el supermercado.   
  • Salsa clara (Usukchi soyu): su color es un poco más claro y tenue, porque contiene menos soja, y el sabor es más ligero. Se usa, sobre todo, para cocinar sopas como el ramen, el suimono y el nimono.    
  • Salsa blanca (Shiro soyu): se destaca de las demás por su aroma tan peculiar. En su elaboración se añade menos soja y más granos de trigo. Se utiliza para cocinar sopas claras y ligeras, así como también para vinagretas o salsas agridulces.  
  • Tamari: su textura es más espesa y su característica principal es que no lleva trigo en su preparación. Esta salsa de soja también funciona para acompañar el sushi o el sashimi.   
  • Salsa de doble fermentación (Saishikomi shoyu): es la más clara y transparente de la lista y su proceso de elaboración también es el más lento. Es menos salada que las demás y tiene notas dulces en su sabor.   

     

PREPARA SALSA DE SOJA DESDE CASA  

Antes de comenzar a preparar la salsa de soja es importante realizar el mise en place adecuado. El mise en place es un término culinario que significa tener todos los ingredientes y utensilios listos y organizados antes de empezar a cocinar.   

Para preparar una salsa de soja asegúrate de tener a la mano los siguientes ingredientes: granos de soja, trigo tostado, agua, sal y koyi (un hongo utilizado para el proceso de fermentación). Además, necesitarás una olla grande, una bandeja para hornear y una tela de algodón para filtrar la salsa.   

Paso a paso para preparar salsa de soja:   

  1. Lava los ingredientes básicos: comienza por remojar los granos de soja y el trigo tostado por separado durante la noche. Luego, escúrrelos y déjalos a un lado.   
  2. Hierve los granos: en una olla grande agrega los granos de soja y el trigo tostado y cúbrelos con suficiente agua. Pon la olla a fuego medio durante aproximadamente 3 horas, revolviendo de vez en cuando para evitar que se peguen en el fondo del recipiente.   
  3. Enfría la mezcla: pasadas las tres horas, retira la olla del fuego y deja que la mezcla se enfríe a temperatura ambiente. Una vez que esté lo suficientemente fría, agrega el koji y mézclalo bien.   
  4. Pásala a una bandeja para hornear: deja la bandeja en un lugar cálido y oscuro por aproximadamente una semana para que fermente. Cubre la parte superior con una tela de algodón. Durante esta etapa, revuelve la mezcla una vez al día.   
  5. Prueba y añade sal al gusto: pasada la semana, la mezcla habrá fermentado y adquirido un aroma y un sabor. Cocina la salsa a fuego lento durante una hora y añade la cantidad de sal que creas necesaria.   
  6. Déjala enfriar: cuando se enfríe, cuélala a través de la tela de algodón para eliminar cualquier residuo sólido. Transfiere la salsa de soja filtrada a un frasco limpio y hermético.   

Recuerda almacenarla en el refrigerador y consumirla dentro de las semanas siguientes, para mantener su frescura y su sabor.   

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Recetas recomendadas

  

 

RECETAS DELICIOSAS CON SALSA DE SOJA  

Después de aprender a preparar nuestra propia salsa de soja, podemos comenzar a utilizarla en nuestros platos favoritos. El sabor salado de la salsa permite realzar el sabor de muchos ingredientes y agrega profundidad y equilibrio a muchas recetas.  

Para demostrártelo, aquí te contamos 10 recetas deliciosas que puedes preparar con salsa de soja.  

  • Pollo teriyaki: una preparación que se marina con salsa de soja, mirin y azúcar, luego se cocina a la parrilla o se saltea en una sartén. La salsa de soja le da al pollo un sabor agridulce y salado, además de destacar los sabores de la marinada dulce. 
  • Arroz frito: uno de los platos más populares de la cocina asiática. Se prepara salteando arroz con vegetales, carne, camarones y otros ingredientes.   
  • Salteado de verduras: combina la salsa de soja con aceite de sésamo, ajo y jengibre para darle un toque umami a las verduras. La salsa de soja complementa muy bien los sabores frescos y crujientes de las verduras.   
  • Ramen: la salsa de soja es uno de los ingredientes esenciales para la receta del caldo base para la sopa de fideos ramen. Una pasta o un caldo siempre sabrán bien con este tipo de aditivos.   
  • Lomo en salsa de soja: también puedes marinar una carne a la parrilla con salsa de soja. Otros ingredientes que le puedes agregar a este plato son ajo y jengibre o algunas especias como tomillo o comino. La salsa de soja permite que el sabor de la carne sea un poco más tierno.   
  • Brochetas de pollo o de carne: disfruta de unas deliciosas brochetas de carne o de pollo vertiendo un poco de salsa soja antes del primer bocado. A estas brochetas también les puedes agregar algunas verduras, frutas asadas o papas cocidas.   
  • Sushi: la salsa de soja y el sushi son un matrimonio inseparable. Cubre una de las superficies con salsa de soja y complementa el sabor suave del pescado crudo y el arroz.   
  • Salmón a la parrilla: puedes agregarle miel y jengibre para asegurar un plato sabroso y típico de la gastronomía asiática. La salsa de soja realza los jugos del salmón y al asarse crea una capa caramelizada deliciosa.  
  • Aderezo para ensaladas: hablamos de cualquier tipo de ensalada, la salsa soja le va muy bien y acompaña su sabor fresco y crujiente.   
  • Brotes de soja salteados: una de las guarniciones más populares de la cocina asiática. Combina muy bien con una gran variedad de platos principales y se puede comer como acompañamiento o para darle más sabor a una ensalada.   

  

 

FUENTES: